Investigadores australianos, liderados por el Dr. Whiteford, han analizado los datos obtenidos en el Global Burden of Diseases, Injuries and Risk Factors Study 2010, para estimar la carga de morbilidad atribuible a los trastornos mentales y a los problemas de abuso de sustancias. Esta carga ha sido estimada mediante 3 indicadores de salud: años de vida perdidos por mortalidad prematura (YLLs, siglas en inglés), años de vida ajustados por discapacidad (DALYs) y años de vida con discapacidad (YLDs).
Actualmente en nuestro país tanto la enfermedad mental como las adicciones, ocupan un segundo plano en la atención médica y en los presupuestos sanitarios. Sin embargo, los datos obtenidos en este análisis delatan la necesidad de que se preste mayor atención a estos problemas, dadas las consecuencias tan graves que están teniendo en la salud y en la calidad de vida de la población.
Según los resultados del estudio, los trastornos mentales y por abuso de sustancias contribuyen de forma notable a la carga mundial de enfermedad, lo que representa alrededor de 7,4% de la carga de morbilidad en todo el mundo. Su carga es mayor que la de enfermedades como el VIH/SIDA, la tuberculosis, la diabetes o las lesiones en medios de transporte. Estos problemas, en 2010, fueron la principal causa de YLDs en todo el mundo, supusieron 183,9 millones de DALYs y representaron 8,6 millones de YLLs.
En concreto, los trastornos depresivos representaron el 40,5% de los DALYs provocados por trastornos mentales y de abuso de sustancias, los trastornos de ansiedad representan el 14,6%, los trastornos de consumo de drogas ilícitas el 10,9%, el abuso de alcohol el 9,6%, la esquizofrenia el 4,4%, el trastorno bipolar el 7%, los trastornos generalizados del desarrollo el 4,2%. Los DALYs variaron según la edad y el sexo, teniendo la proporción más alta las personas de entre 10 y 29 años.
En este análisis, se observó que los trastornos mentales y los relacionados con el abuso de sustancias eran la quinta causa de muerte y enfermedad en todo el mundo. Por otro lado, cuando midieron el impacto de estas dolencias en cuanto a su capacidad para generar trastornos no letales, encontraron que estos problemas estaban a la cabeza de la lista, con una contribución del 22,8%.
Además, según los datos de este trabajo, las enfermedades mentales y el abuso de sustancias han aumentado su presencia en las últimas décadas, sobre todo en los países en vías de desarrollo. De este modo, la carga de estos problemas aumentó un 37,6 % entre 1990 y 2010, lo que hace que el futuro sea aún más preocupante, dado que el aumento en la esperanza de vida supondrá que más personas con enfermedades mentales y trastornos relacionados con el uso de sustancias vivirán durante un mayor periodo de tiempo.
La discapacidad y los problemas de calidad de vida que provocan estos trastornos son muy preocupantes. Los propios investigadores hacen hincapié en que un gran número de muertes debidas en última instancia a la enfermedad mental, como los suicidios, podrían estar clasificándose en otras categorías, con lo que su impacto estaría infravalorándose.
En vista de la magnitud de la contribución de estos trastornos a la mala salud mundial, la mejora de la salud sólo es posible si los países hacen que la prevención y el tratamiento de los trastornos mentales y las adicciones a sustancias, sean una prioridad de salud pública.
Referencia del artículo:
Whiteford, H.A.; Degenhardt, L.; Rehm, J.; Baxter, A.J.; Ferrari, A.J.; Erskine, H.E. et al. (2013). Global burden of disease attributable to mental and substance use disorders: findings from the Global Burden of Disease Study 2010.  Published Online: August 29, 2013, http://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(13)61611-6.
Fuente:

http://www.infocop.es/view_article.asp?id=4749